Soraya Jiménez te extrañaremos

18.08.2007 00:46

 
Soraya Jiménez te extrañaremos

Por: Didier de la O (Didi)


Antes que todo me uno al dolor de la familia Jiménez y de los 115 millones de compatriotas, que hoy lamentan la perdida de una ganadora y guerrera tanto del deporte como de la vida cotidiana.

En una extensa nación territorial, acostumbrada a obtener por lo regular malos resultados, ya sea dentro de competiciones de índole amateur y profesiona...l. En contrapuesto también nacieron garbanzos de a libra, como fue el caso de la ex medallista de oro de Sídney 2000 (Jiménez Mendivil) que por su coraje, entrega, temple nos enseñó que si se podía lograr los éxitos trazados y que de un NO de mucha gente y de pronósticos negativos, inclusive por seres humanos sin criterio personal y cercanas a ella, esta les otorgo una cachetada con guante blanco al momento de quedarse, con la presea más valiosa y significativa que puede haber en una justa olímpica.

Paradójicamente, no se termina por entender como nuestro querido México, sigue existiendo dotes muy sustanciales de machismo y de lo que todos presumen, pero a la vez se carece de una evolución relevante en nuestro territorio y de una igualdad trascendental entre los géneros..

Por su parte es hora, es el tiempo necesario de que las premisas y los eventos deportivos donde se encuentre el género femenino compitiendo, se le otorgue una cobertura televisiva, de acuerdas a las circunstancias que esta acredita, inclusive si en ese momento está en plena participación el género opuesto. De tal manera, que se debe sostener en la memoria de todo tipo de individuo que se haga llamar mexicano, que las damas han puesto el pecho a las balas la mayoría de las ocasiones.

Hace unas semanas atrás, encendí mi reproductor de DVD e instale el filme llamado “La Dama de Hierro”. Verdaderamente sin hacer una comparación, entre la sociedad azteca y la inglesa, puesto que resultaría inútil realizarla o más bien pensarla, porque nos quedaríamos de la misma forma como nos encontramos actualmente.

Siguiendo el rodaje, debo decir con toda franqueza y honestidad ,que dentro de mis pupilas se me quedaron estancadas para el recuerdo, algunas escenas que fueron de gran utilidad para mi aprendizaje significativo, como la increíble fuerza de voluntad, decisión, compromiso y sobre todo el gran pundonor, y la famosa madre de todas de las virtudes la paciencia, que sostuvo en toda su esencia la gran Margaret Thatcher, para soportar todo tipo de burlas propinados por el ambiente político y mayoritariamente dominado por el ente masculino, es de admirarse a un mujer que demostró, que no le peso en lo absoluto y que sobre todo, no fue una limitante en su andar el género que le proporciono el gran arquitecto del universo.

Se tiene reconocer sobradamente, un pilar importante y fundamental para que la ex Primera Ministra del Reino Unido, alcanzara y se consolidara como un político de gran respeto y ejemplo entre los años de 1979 a 1990, fue la labor intachable de su esposo Denis Thatcher que siempre se mantuvo a la sombra, pero sin ninguna envidia o recelo, al contario de su parte siempre recibió apoyo y un cariño incondicional a la señorita Roberts y posteriormente a sus dos mellizos. Les pregunto queridos lectores, varones mexicanos y hombres de familia, ¿Cuantos realmente se atreverían a cursar esa experiencia, de quedar o pasar al anonimato enfrente de sus señoras? No es muy difícil contestar esa interrogante, hasta diría que es sencilla, ya que me sobran los dedos de la mano, para contabilizar los que acepten dicho cuestionamiento o situación planteada, por egocéntricos y también porque este conflicto, atraviesa en demasía la cuestión cultural de todo nuestro pueblo.

Otra cosa que me molesta y me enfada, es la falta de visión y de madurez por muchos jóvenes y adultos de esta república mexicana, que utilizan al ser más preciado de la humanidad, para únicamente satisfacer las necesidades básicas del hombre y acrecentar su descendencia, pero lo que realmente sucede en esta problemática en sí, es que están escondiendo su verdaderos miedos y temores de la vida y cogen (agarran) a la mujer para sentirse más seguros, en muchas ocasiones ocurre eso, pero cuando se aburren, la arrojan como muñeca sin compostura y eso es imperdonable.

Retornando a la materia, no se puede ni se debe conciliar como el sistema podrido del país, degrada en alto grado a la mujer en el ámbito deportivo, ya que cuando esta aparece en estos temas de dominio público, lo menos que efectúan es informar, porque la mayoría no está lo suficientemente capacitada para llevar acabo esos oficios y por el contario las insultan pagándoles, unas cuantas monedas, aunque dicha plata no posee valor moral, puesto que cuando aparecen dentro del televisor es enseñando sus atributos femeninos, su poca vestimenta o casi nula y dejando para los albureros y con mente distorsionada mucho a la imaginación. Esto se está elevando cada vez más, porque los que manejan el deporte en este suelo, quieren seguir embobando a estos habitantes, para darles la estocada final en los momentos decisivos, que requieren y exigen de igual manera más viveza y lucidez por parte nuestra.

Concluyendo y sin haberla conocido personalmente a la gran atleta azteca Soraya Jiménez Mendivil estoy casi seguro que no le agradara en un porcentaje considerable, que ahora utilicen su nombre para muchos aspectos y menos que los que nunca la apoyaron, ahora se conviertan en santos a costillas de ella. En cambio, lo que si le gustaría y estoy completamente seguro, es que a los atletas soñadores como ella lo fue alguna vez, les brinden el apoyo y sostén necesario para triunfar.

Descanse en Paz Soraya Jiménez Mendivil

Volver

Contacto

El Deporte sin Tapujos

© 2014 Todos los derechos reservados.

Crea una web gratisWebnode